Derecho a decidir sobre la propia muerte (ejemplo llevado al absurdo)

Leo la siguiente noticia publicada ayer por Europapress, y que pueden ver en el vídeo que les adjunto:

Agentes de la Policía Nacional han salvado 'in extremis' la vida a un joven de 25 años que se había rociado con gasolina y pretendía quemarse a lo 'bonzo' en el distrito madrileño de Fuencarral-El Pardo, según ha informado la Jefatura Superior de Policía de Madrid. El joven contaba con dos mecheros para prenderse fuego cuando dos policías destinados en el Grupo de Atención al Ciudadano lograron impedírselo en el último momento. El suceso tuvo lugar a la altura del número 42 de la calle Melchor Fernández Almagro, donde se desplazaron varios coches patrulla gracias a una llamada recibida sobre las 2 horas en la Sala del 091, con la que se alertó de que una persona sentada en un banco se estaba rociando con líquido inflamable. Según ha informado un miembro del Cuerpo Nacional de Policía, tras recibir la llamada "alertando de que una persona se había vertido encima un bote de gasolina", agentes de radio-patrulla se dirigieron al lugar "con la mayor brevedad posible". Pese a la premura, cuando la Policía Nacional llegó al lugar no había nadie, "ni siquiera quien llamó al 091", ha precisado el agente. La Policía Nacional intervino "sigilosamente y por la espalda" del joven, que desprendía un fuerte olor a gasolina, para intentar que "no se adelantase la ignición", ha confesado el policía. Fue entonces cuando "al arrebatarle de las manos el mechero que intentaba encender, el hombre "se puso agresivo" e intentó "sacar otro de su bolsillo", por lo que finalmente tuvo que ser reducido. Una vez reducido, los agentes solicitaron la presencia en el lugar de una ambulancia del Samur. Tras una primera asistencia por las abrasiones sufridas por el combustible, los servicios médicos trasladaron al joven hasta un centro hospitalario, donde está recibiendo los cuidados necesarios. Se desconoce la causa que motivó el intento de suicidio, pero el portavoz de la Policía Nacional ha asegurado que en el momento de lo ocurrido, el hombre sólo pedía una cosa: "Decía que le dejásemos morir, que él quería morir y que nos fuésemos de allí".

Y yo digo, siguiendo los principios de los defensores de la eutanasia, que la policía hizo muy mal. Si el hombre quería acabar con su vida, ¿por qué se lo impidieron? ¿Quién se arroga el derecho a decidir que otra persona tiene que seguir viviendo, cuando esa persona desea acabar ya su vida? Cada uno es dueño de su vida, y nadie tiene que decirme cuándo ni cómo debe acabar mi vida. Eso lo decidiré yo. Ya que nadie me preguntó cuándo, ni como ni dónde nacer, al menos que me dejen elegir cuándo, cómo y dónde morir.

Los policías han obligado a ese hombre a seguir viviendo contra su voluntad. Sin duda actuaron movidos por principios religiosos (vaticanistas, para ser más precisos). Muy respetables, como todos (como dice la candidata a la presidencia de la Comunidad de Madrid). Pero que no se pueden imponer a nadie. Si ese joven quería morirse, el respeto a su dignidad implica haberle dejado acabar con su vida. Máxime cuando no hacía mal a nadie con ello. El pobre hombre sólo pedía que le dejaran morir... y no se le permitió. Puede que los policías pensaran que era mejor que el hombre no se suicidase. Pero eso es irrelevante. Porque el hombre pensaba lo contrario. Y la libertad es el valor más sagrado del ser humano, que esos policías no supieron respetar. Movidos por su intransigencia religiosa. No se puede imponer a nadie los propios valores. ¡Viva la libertad!

Seguramente saldrá alguien diciendo que el hombre aquel no estaba en sus cabales. Que estaba trastornado. ¿Y aunque fuera así? ¿Por eso no se le va a dejar morirse en paz? El derecho a decidir sobre su propia vida es sagrado, porque la libertad de cada uno está por encima de cualquier otro valor. Ya lo dijo Zapatero: "La libertad nos traerá la verdad".

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Estos absurdos argumentos, que suponen un ataque a la inteligencia, son los mismos que se utilizan para defender la eutanasia. Copio textualmente las palabras de alguien que defiende el derecho a la eutanasia, en un comentario a un artículo mío en ReL:

"No existe el derecho de obligar a nadie a vivir. Yo quiero que sea cada persona la que decida sobre su propia vida, usted quiere quitarles ese derecho. Está muy claro quien esta a favor de la libertad y quien no.

Me parece muy triste que una persona decida que quiere morir, pero considero que no hay nadie en el mundo capacitado para decidirlo en su lugar. Si una persona no es dueña de su propia vida con qué derecho puede ser dueña de sus pertenencias materiales o de su conciencia. Si una entidad exterior decide cuando puede o no morir por qué no iba a poder decidir cómo puede vivir."

Pues eso.